El suelo radiante es uno de los sistemas de calefacción más eficientes.
Consume muy poca energía y además es ecológico.
Sin embargo, es muy importante preocuparse de su mantenimiento para que dure más tiempo.
Igual que debes purgar los radiadores convencionales cada año, también hay que tener una serie de cuidados con el suelo radiante.
En este post te contamos:
- Por qué un buen mantenimiento es clave.
- Cuántos años puede durar si lo cuidas bien.
- Cómo llevar de forma fácil su mantenimiento.
¡Vamos allá!
Por qué es importante el buen mantenimiento del suelo radiante
En comparación con otras formas de calefacción, el suelo radiante apenas requiere mantenimiento.
Sin embargo, es importante dárselo para:
- Alargar su vida útil.
- Prevenir problemas de funcionamiento.
- Ahorrar dinero en reparaciones que podrías haber evitado.
- Disfrutar del confort que aporta sin quedarte sin tu fuente de calor en pleno invierno.
Pero, ¿por qué puede ocurrir esto si el mantenimiento no es el adecuado?
Básicamente porque funciona con una red de tuberías llenas de agua (aquí puedes descubrir en detalle este sistema).
Por lo tanto, es normal que se acumulen bacterias, restos de elementos químicos y especialmente microorganismos (se reproducen muy fácilmente porque la temperatura del suelo radiante, entre 30 ºC y 45 ºC, es la ideal para estos seres vivos).
Debido a esto, otros elementos como los purgadores, las llaves, los empalmes y las juntas también están expuestos a estos riesgos.
Cuántos años dura el suelo radiante cuando se mantiene en buen estado
Un mantenimiento correcto contribuye a que tu suelo radiante dure más.
Esto son muy buenas noticias para tu bolsillo porque te ahorras dinero.
Y también para el medioambiente, ya que una instalación duradera también implica un ahorro de materiales y recursos.
De hecho, este sistema de calefacción puede aguantar entre 30 y 50 años (algunos fabricantes ofrecen garantías de hasta 25 años).
En cualquier caso, depende del sistema elegido, de los materiales empleados, del correcto mantenimiento y de que el técnico haya hecho una buena instalación.
Qué tipo de mantenimiento requiere un suelo radiante
El mantenimiento del suelo radiante es sencillo.
A continuación, te contamos las principales consideraciones que debes tener en cuenta.
1. Realizar una correcta instalación con expertos
Una buena instalación es determinante para que el suelo radiante funcione correctamente durante muchos años.
Esta tarea debe realizarla un equipo de profesionales que estén especializados y habituados a este tipo de trabajo.
Es el primer paso para que siga marchando como el primer día incluso años después.
2. Revisiones cada dos años
También te aconsejamos que cada dos años nos llames para revisar la instalación, especialmente los caudalímetros.
Conocemos al detalle cada elemento y podemos detectar cualquier elemento que no funciona como debiera antes de que se convierta en un problema.
3. Regular los circuitos de forma independiente
Es común que en un mismo hogar se instalen varios circuitos de tuberías.
A través del caudalímetro puedes regular la cantidad de agua que circula por cada uno.
De este modo, llegaría más agua al comedor que al baño, por ejemplo.
4. Limpiar el circuito del suelo radiante
De vez en cuando, puede ser necesario limpiar el circuito.
Si ocurre algunas de estas cosas, tienes una pista de que quizás sea el momento:
- El agua es de color oscuro.
- El suelo radiante calienta menos que antes o notas que no funciona igual.
- El agua se mueve más lentamente por las tuberías.
Ahora te contamos en detalle cómo hacer esta limpieza, aunque lo recomendable es que lo haga un experto.
¡Sigamos!
Cómo realizar la limpieza de un circuito de suelo radiante
Como acabamos de mencionar, es importante que realice la limpieza un técnico especializado.
Este proceso se desarrolla de este modo:
- Vaciar todo el contenido de agua.
- Limpiar los colectores y los circuitos con agua a presión.
- Limpiar manualmente las válvulas.
- Rellenar las tuberías con agua que contenga un líquido limpiador.
- Vaciar de nuevo el contenido de la instalación y volver a rellenarla con agua para que vuelva a funcionar igual que antes.
No es algo especialmente complicado para alguien que sabe, pero un técnico conoce cuáles son los materiales y los procedimientos correctos para hacerlo de forma óptima para tu instalación.
Si crees que es el momento de revisar tu suelo radiante, ponte en contacto con nosotros.